Reparto de paquetería con drones: ventajas y retos

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La innovación ha llegado para el reparto de paquetería con drones. Grandes empresas, como Amazon o Google, ya están realizando pruebas para entregar productos mediante estos pequeños aparatos voladores.

La aplicación de estos drones al entorno logístico ya se ha desarrollado para el control de stock y la gestión de mercancía en almacenes. La entrega de paquetería con estos aparatos está siendo estudiada y estas son las principales ventajas y retos que se están teniendo en cuenta para su aplicación.

Ventajas del uso de drones para la última milla

Una de las principales ventajas del uso de drones es la disminución de tráfico en carretera, al utilizar este nuevo medio aéreo, se reduce la cantidad de flota terrestre necesaria para el transporte de las mercancías.

A su vez, muy ligado a este punto se encuentra el descenso de la contaminación ambiental. Al reducir la flota de vehículos de combustión en favor de los drones se reducen también las emisiones contaminantes asociadas.

Otro punto que marca una ventaja competitiva del uso de drones es la posibilidad de acceso que tienen a zonas difíciles o poco pobladas. Esto puede ayudar a la última milla en zonas rurales, ya que los drones tienen la posibilidad de esquivar muchos obstáculos que una furgoneta tradicional no podría (calles muy estrechas, pavimento en malas condiciones etc.).

Por último se encuentra la reducción de los plazos de entrega. En comparación a las furgonetas de reparto, los drones son más rápidos y tienen la ventaja de no verse implicados en atascos, semáforos o calles cortadas por ejemplo.

Inconvenientes del reparto de paquetería con drones

Si bien son muchas las ventajas que el uso de drones puede traer a la última milla, también hay muchos retos e inconvenientes que se han de salvar para que la utopía de su uso se convierta en realidad.

El primero de esos retos es la seguridad. Se ha de probar que estos dispositivos no suponen ningún peligro ni para la población ni para los elementos urbanos (árboles, cables de luz, edificios…). Esto podría delimitarse mediante normas de circulación que especifiquen rutas, horarios o zonas por las que los drones puedan circular. El caso de los robos también es un aspecto muy importante a tener en cuenta. Hay que garantizar tanto la seguridad del dron como la de las mercancías que transporta.

Por otro lado, el precio de los drones supone un reto para las empresas. Se trata de una tecnología que requiere una inversión elevada, por lo que, a excepción de empresas con altos niveles de facturación, no se considera asequible para todas las compañías.

Además se encuentra la dificultad ligada al peso y volumen de paquetes que los drones son capaces de transportar. Mientras que con una furgoneta se pueden cargar cientos de paquetes, de volúmenes y pesos diversos, con los drones este aspecto se encuentra mucho más limitado.

Por último, el proceso de entrega puede conllevar más ineficiencia en caso de que el cliente no se encuentre para recibir el paquete. Si el cliente no está en casa, el paquete ha de volver al almacén. En cambio, con el transporte tradicional el repartidor continuaría la ruta sin necesidad de volver al almacén hasta el final de la misma.

El uso de drones en la última milla hoy en día

Son muchos los retos que los drones traen consigo para el reparto de última milla, pero ya se están realizando pruebas en algunos países como Estados Unidos, Australia, Irlanda o Reino Unido.

Actualmente en España hay diversas limitaciones al vuelo de drones (como la de la prohibición de transportar mercancías peligrosas). A pesar de ello, se están llevando a cabo diversas pruebas, como las del proyecto Priority Dron centrado en el transporte de mercancías con dimensiones moderadas.

A continuación te dejamos esta infografía sobre los pros y contras del reparto con drones:

Reparto de paquetería con drones